Mario Ramos escuchó el timbre de su teléfono sonar a las 9:15 de la mañana de este martes: era un viejo amigo paramédico que le acababa de notificar que su hija, con tan solo 23 años de edad, había fallecido.
Roxana Carolina Ramos Prado había salido de su casa en Naguanagua, con su hijo de seis años a bordo de una moto Bera SBR, color fucsia. Ambos estaban emocionados porque el pequeño iniciaría este primero de agosto sus clases de natación en el Colegio de Abogados del Estado Carabobo.
Cuando iban en la Autopista del Este, a la altura del kilómetro 66, cerca del Distribuidor Las Clavellinas, un carro golpeó la parte trasera de la moto y madre e hijo perdieron el control hasta caer en el pavimento: Roxana murió al instante y el niño sufrió varias lesiones. El responsable de este hecho se dio a la fuga.
Comisiones mixtas de seguridad acudieron al sitio para trasladar a las víctimas hasta la Ciudad Hospitalaria Dr. Enrique Tejera (CHET): la madre fue llevada directo a la morgue, mientras que el pequeño, que había entrado en un estado de shock, fue enviado en una ambulancia hasta el área de Emergencia Pediátrica.
Mario explicó que su hija era la penúltima de cuatro mujeres. Estaba estudiando enfermería en la Unefa y trabajaba en un restaurante de comida japonesa.
Él había asumido las diligencias funerarias mientras la madre de su hija verificaba el estado de salud del niño. “Iban a la piscina. Allí se encontrarían con un amiguito del niño para iniciar la natación”, explicó desconsolado en las afueras de las oficinas forenses, tratando de asimilar lo sucedido.
Amigos y familiares acudieron de inmediato al centro de salud para prestar apoyo a la familia. La mamá de Roxana señaló, alrededor de las 11 de la mañana, que personal médico le había confirmado que su nieto se encontraba estable, pero requerían realizarle una tomografía para evaluar la profundidad del daño ocasionado por el fuerte golpe en la cabeza. “Estamos esperando que venga la ambulancia para hacerle el examen”, agregó la señora con la voz quebrada y los zapatos del niño en la mano.
