Cinco adolescentes tuvieron la brillante idea de irse a celebrar al Cementerio Municipal de Naguanagua, en vez de acudir a cualquier local nocturno el pasado jueves 23 de febrero. Aunque podría pensarse que se trataría de algún acto fuera de lo común, la situación solo fue tildada de “raro”, debido a la acción de los jóvenes de hoy en día, de irse a ingerir alcohol en un cementerio.
El “parrandón” fue subiendo de nivel en horas de la madrugada, razón por la cual se torna “rara”, cuando los mismos comenzaron a subir fotos en sus historias de whatsapp e instagram. Lo que faltó fue acompañar las mismas con las etiquetas #TBT #Memories #CrimeHorrorStories.
Se supo que los mismos, ingirieron alcohol en las tumbas donde reposan restos de muchos familiares, amigos y conocidos. Además, los cigarritos tampoco faltaron, hasta la “cornetica” de un Xiaomi 9s Pro para pasar el rato con música que no se pudo descubrir (ojalá no haya sido Bad Bunny).
La información de lo que sucedía aquella noche, se supo a través de un ciudadano que no concilió el sueño y comenzó a revisar sus redes sociales cuando le tocó observar aquellas historias con exceso de filtros de IG, donde jóvenes “gozaban un puyero” en pleno camposanto. Rápidamente tomó capturas y luego denunció al cuerpo de la Policía Municipal de Naguanagua.
Los funcionarios atendieron la situación y rápidamente activaron al organismo que atiende este tipo de casos, debido a que se trataba de menores de edad. Fueron citados a la sede de la Dirección de la Policía Municipal, en compañía de sus representantes para aplicar las sanciones correspondientes
Les dieron una charla a los menores sobre moral, respeto al prójimo y la responsabilidad penal en materia de adolescente. Además, la consejera a cargo del caso realizaría una orientación y evaluación para referir a algún personal especializado, en caso de requerirlo. Asimismo, tuvieron que limpiar el camposanto debido a la basura que dejaron.